domingo, 29 de enero de 2012

DIA 19


Día 19: Una Vasija Vacía

2 Reyes 4:3
Hay dos tipos de personas, los que preguntan, ¿Dios puede? Y los que dicen, ¡Dios puede! ¿En que grupo esta usted?
Dios puede refrescar su espíritu. Dios puede sanar a los enfermos. Dios puede liberar su hogar. Dios puede abrir caminos donde no los hay. ¡Solamente tenemos que dejar que el aceite de la unción fluya en nuestras vidas! Déjeme decirle lo siguiente… la unción del avivamiento no siempre sigue su plan o su horario. Cuando uno deja fluir el aceite, a veces el aceite se riega por todos lados.
“Y se fue la mujer, y cerró la puerta encerrándose ella y sus hijos; y ellos le traían las vasijas, y ella echaba del aceite. Cuando las vasijas estuvieron llenas, dijo a un hijo suyo: Tráeme aún otras vasijas. Y él dijo: No hay más vasijas. Entonces cesó el aceite.” (2 Reyes 4.5-6).
Dios se siente atraído por los vasos vacíos; Él traerá avivamiento a donde encuentre necesidad. Los más grandes candidatos para los milagros no son las personas cuyos vasos están llenos, sino aquellos cuyos vasos están vacíos y sus corazones expectantes.
El aceite del avivamiento comienza a fluir cuando “cerramos” la puerta y entramos al lugar secreto con Dios. Cierre la puerta a aquellos que son negativos y entre a su closet de oración. ¡Ore hasta que el aceite empiece a fluir en su hogar! ¡La viuda empezó a hacer fluir el aceite y Jehová Jireh se manifestó! ¡Él proveyó más que suficiente!
Tal vez tenga grandes necesidades hoy, así como la viuda. Jehová Jireh se manifestará cuando actúe en obediencia con Sus mandamientos. La provisión de Dios de aceite es más que suficiente para sus necesidades.
Recuerde, Dios no desea gente llena sino vacía. Mientras usted sea una vasija vacía, Dios lo llenará. El aceite no parará de fluir hasta llenar todas las vasijas.
PUNTO DE ACCIÓN
Haga un inventario de su espíritu y vacíese a usted mismo de las cosas materiales de este mundo para poder ser aún más lleno de la unción del Espíritu Santo.
2 Reyes 4:3-6, Salmos 37:3-5
*Tomado de la Guía Bíblica para los 21 Días de Ayuno de Jentezen Franklin

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